ingenuidad pura

cuando me preguntan de amores siempre llego a ti

y al brillo distintivo que tenían tus ojos cuando los miré por primera vez,

parada sobre el andén sucio de una calle sumida en la ciudad del caos perenne.

ahora a veces me pregunto si será solo aquella memoria adornada con recuadros barrocos,

como las pinturas de la casa de mi abuela,

que, de lejos, se ven majestuosas,

como alguna vez estoy segura que te vi.

pero si te acercas, 

el óleo ya se está descascarando y el lienzo se encuentra medio roto

en las esquinas.

tus ojos, de repente, puede que no hayan brillado esa noche

o-qué terrorífico pensamiento-nunca.

pero si bien,

siempre que me pregunten de amores,

insisto,

a pesar de mis años, de la sabiduría impuesta por las truculencias de agravios repetidos,

volveré a ti y al brillo de tus ojos aquella noche de febrero:


porque te quise con los más sincero que tuve,

con la ingenuidad más pura que jamás volveré a tener.


Comentarios

Publicar un comentario

Los más leídos